Esta madrugada falleció Leo Román Álvarez, el agente policial que estaba internado desde el 4 de diciembre con pronóstico reservado, y luego de sufrir una brutal agresión a la salida de un pub, sobre calle España.
El policía estaba internado en el Hospítal Privado Regional, y estuvo varios días peleando por su vida. Pero en las últimas horas los pronósticos eran desalentadores, ya que había sufrido “muerte cerebral” por las lesiones recibidas.
Su familia confirmó esta mañana el fallecimiento de Álvarez. El cuerpo será trasladado a la morgue local, para ser sometido a una autopsia, de acuerdo a lo que dispuso el Ministerio Público Fiscal.
Álvarez fue agredido en los alrededores de un local nocturno el pasado 4 de diciembre. Darío Arabales, de 22 años, fue imputado por lesiones graves, por lo que ahora la causa cambiaría a “homicidio”.
La audiencia de imputación fue realizada hace una semana. Arabales había sido detenido el lunes 5 por la tarde en medio de la investigación que lleva adelante la Fiscalía.
El hecho ocurrió en el boliche After 7. Aparentemente los dos involucrados mantuvieron una discusión dentro del establecimiento, aunque no pasó a mayores.
Sin embargo, cerca de las 6,20, cuando el local nocturno cerró sus puertas, tanto la víctima quien es empleado policial, como el imputado, se encontraron afuera y volvieron a discutir.
Cuanto la pelea verbal subió de tono, quienes los acompañaban lograron separarlos, pero en un momento “a uno de los amigos de Arabales que lo sujetaba, se le escapa y sale corriendo a una velocidad increíble, toma por sorpresa a la víctima y le pega un puñetazo muy fuerte y se va”, relató el fiscal.
El policía sugrió una fractura de los huesos nasales, de pómulo y hematomas en todo le cuerpo.
El empleado policial, quedó tendido en el piso y fue atendido primero por una ambulancia que llegó al lugar. Ante esta situación intervino la Comisaría 2°, desde donde denunciaron el hecho de oficio.